España rechaza el TTIP.

Almudena Grandes: No al TTIP.

Miles de personas se manifestaron en la tarde del pasado sábado  con motivo del Día de Acción Global contra el Acuerdo Transatlántico de Libre Comercio e Inversiones, conocido conocido por el acrónimo en inglés TTIP. En Madrid, se unieron a la protesta numerosas organizaciones políticas y sociales: casi 200 organizaciones convocantes, desde sindicatos como CCOO, CGT o Solidaridad Obrera, partidos políticos, como Podemos o Equo, pasando por asambleas del 15M y otras organizaciones como Attac. Todas ellas respaldaron la convocatoria de rechazo contra un acuerdo comercial entre la UE y EEUU, al considerar que daba demasiado poder a las grandes empresas y a las multinacionales.  Entre los convocantes, partidos como IU, Podemos y Equo, y sindicatos como CCOO y CGT. También ONGs como Ecologistas en Acción o la Coordinadora ONGD, entre otras. El recorrido de la marcha tuvo lugar entre Neptuno y Sol. Tras la pancarta de cabecera, podía leerse: “Las personas y el planeta no somos mercancías sino grupos de personas”. Provenían del barrio de Prosperidad, de la Sierra Norte de Madrid o de diversos círculos de Podemos como el de Lavapiés o San Blas Canillejas. En la pancarta principal de Podemos, Rafa Mayoral o Jesús Montero llevaba la voz de la formación contra la aprobación de dicho acuerdo. Todas las banderas desplegadas mostraban su rechazo al tratado  que está negociando en secreto la Comisión Europea con EEUU.

La eurodiputada de IU Marina Albiol, que está luchando desde Bruselas contra el TTIP felicitó a los movimientos sociales y organizaciones que formaban la campaña estatal contra el tratado. “Cuando las personas conocen el tratado y empiezan a leer sobre él, crece el rechazo porque se dan cuenta que puede llevarse por delante buena parte de nuestros derechos”. Albiol confía en que, frente al pacto entre socialdemócratas, conservadores y liberales, la ciudadanía se movilice y se pueda paralizar el acuerdo. “El límite que tiene la avaricia de las multinacionales es la resistencia”. Entre las pancartas, frases como “Vampiro, pulpo y gusano, chupa el TTIP a gentes y estados”, “Cocinan el TTIP en secreto porque es puro veneno” o “Las empresas, con TTIP imperan en Estados y ciudadanos”.

Juan López de Uralde, coportavoz de Equo, explicó las consecuencias medioambientales que tendría la firma de este acuerdo: “Reducirá las exigencias legislativas al mínimo común denominador entre EEUU y la UE. Eso hace que prácticas tan nocivas como el fracking o los transgénicos se extiendan por la UE cuando, hasta el momento, han estado bastante restringidas. También establece una nueva vía de escape para intereses de las multinacionales, con tribunales específicos para litigar contra los países. Es un grave atentado contra los derechos y la democracia”.

Almudena Grande, cerró la manifestación, leyendo un comunicado en el que señaló: “Hoy hemos tomado las calle para expresar el rechazo a una nueva forma de dominación. Los tratados son el camino para que las multinacionales tomen el poder… En este nuevo orden mundial, los ciudadanos nos vemos reducidos a los intereses de las grandes empresas”. La escritora habló de las consecuencias laborales, sanitarias, ambientales y sociales. “Queremos una vida digna y con sentido. En todo el mundo, los pueblos se mandan un abrazo solidario”. Y finalizó diciendo: “No al TTIP, que no es un tratado, sino un golpe de Estado”. Los manifestantes gritaron: “Este tratado lo vamos a parar”, mientras la Orquesta Solfónica ofrecía una de sus canciones. En más de 50 ciudades de toda España y en centenares en todo el mundo, se simultanearon las manifestaciones.